Una página web es de muchísima ayuda a la hora de captar nuevos clientes hoy en día.
El día a día no nos deja tiempo apenas, hay mucha oferta, y una buena manera para buscar proveedores, lugares donde comprar ciertos productos, es Internet.
Por este motivo cada vez más empresas, sea cual sea su tamaño, quieren disponer de su propia página web.
Pero para atraer a más potenciales clientes es necesario que nuestra página web sea de calidad, esté bien estructurada, cargue rápido y por supuesto que tenga una apariencia profesional, clara, a la altura de nuestra empresa.
Uno de los errores más frecuentes que observamos en nuestros más de 8 años de experiencia diseñando y programando páginas web es que muchos clientes usan fotos de sus productos de baja calidad, mal hechas, que no están a la altura del producto o servicio que quieren ofrecer, llegando incluso a restar interés a lo que queremos vender.
Recordad que una imagen (y más aún si es de calidad) vale más que mil palabras, y que normalmente, las personas nos dejamos llevar por las imágenes, por las fotos.
Si una página web dispone de fotos de calidad, hechas por un profesional, el resultado final será increíblemente mejor, y ello repercutirá en que los usuarios de nuestra web se sentirán más atraídos por nuestros productos, verán con más detalle qué vendemos y por lo tanto, aumentarán las posibilidades de venta.
Vivimos unos tiempos con una competencia feroz, hay que luchar mucho más, dedicar más tiempo al trabajo, y una pequeña diferencia puede marcar que se compre en un lugar o en otro.
¡Y esa pequeña diferencia puede ser que nuestra empresa disponga de una página profesional con fotos a la altura, que muestren con todo detalle nuestros productos!
